Mucha gente nunca cree en una verdad, que es cuando no sales por la puerta principal ni por la puerta trasera, las oportunidades que son tuyas en la vida son tuyas y solo tuyas. He visto a muchas personas que, cuando se esfuerzan, fracasan, y cuando son diligentes, se endeudan. ¿Por qué? Porque el momento no es el adecuado. Si en este momento no tienes una sensación, muchas cosas te están empujando, realmente puedes quedarte en el mismo lugar y relajarte, esa es tu bendición. Pero muchas personas no entienden esta verdad, piensan, ay, si me detengo, estoy tan desocupado, desesperado por no tener nada que hacer, y luego empiezan a esforzarse desesperadamente, y después de esforzarse, sienten que son muy desafortunados. ¿Por qué? Porque el momento no es el adecuado, estás ocupado sin sentido. Si el momento es el correcto, no puedes detenerte, todo te empuja hacia adelante, y en este momento, tus esfuerzos, tus contribuciones, pronto te darán un buen resultado. ¿Por qué? Porque es el cielo quien te está preparando las cosas; si el cielo no te ha preparado nada, simplemente quédate en casa, o relájate y cultiva tu carácter. Debes saber que cuando persigues la riqueza, te cansarás hasta morir; lo que es tuyo siempre será tuyo, no te esfuerces sin sentido, no te ocupes sin razón, el esfuerzo se basa en el momento adecuado.