El enigma Satoshi: ¿Quién es realmente el creador de Bitcoin que hoy cumpliría 50 años?

¡Qué absurdo! Hoy celebramos el supuesto 50 cumpleaños de un fantasma digital que posee una fortuna intacta de más de 90.000 millones de dólares. Mientras tanto, yo sigo luchando por llegar a fin de mes.

El 5 de abril de 1975 es la fecha que aparece en el perfil de Satoshi Nakamoto, pero vamos, todos sabemos que esto es pura simbología. Eligió específicamente esta fecha para burlarse del control gubernamental sobre el oro - el 5 de abril de 1933 Roosevelt prohibió que los ciudadanos estadounidenses poseyeran oro, y 1975 marca cuando se levantó esta prohibición. Muy astuto, señor anónimo.

¿Y qué sabemos realmente de él? Absolutamente nada. Aunque su inglés perfecto y sus hábitos de escritura (¿quién usa doble espacio después de un punto en pleno siglo XXI?) sugieren que es un programador veterano, posiblemente británico o estadounidense, y definitivamente mayor de lo que aparenta. Alguien que recordaba perfectamente el intento de los hermanos Hunt de acaparar la plata en 1980. ¿Un japonés? Lo dudo mucho.

Lo que más me fastidia es cómo desapareció sin dejar rastro en 2011. Después de revolucionar las finanzas globales con un simple documento de nueve páginas, simplemente se esfumó. ¿Quién hace eso? ¿Quién crea algo tan transformador y luego se desvanece en la nada, dejando miles de millones sin tocar?

Entre los sospechosos habituales tenemos a Hal Finney (ya fallecido), Nick Szabo (que lo niega), Adam Back (otro negador), y el patético Craig Wright, cuyas afirmaciones ya han sido destrozadas en tribunales. La más reciente teoría apunta a Peter Todd, pero él también lo rechaza como "ridículo".

Lo que me resulta más irónico es que este anonimato, que podría parecer una debilidad, es precisamente lo que ha hecho a Bitcoin tan poderoso. Sin un líder visible, no hay a quién presionar, sobornar o amenazar. No hay punto de fallo central. El sistema funciona porque confía en las matemáticas y el código, no en individuos o instituciones.

Mientras tanto, su creación ha penetrado en la cultura popular de formas absurdas. Desde estatuas reflectantes en Budapest hasta colecciones limitadas de Vans, Satoshi se ha convertido en un símbolo cultural que trasciende las criptomonedas.

Y mientras el precio de Bitcoin oscila alrededor de los 85.000 dólares, sigo preguntándome: ¿está muerto? ¿Perdió sus claves privadas? ¿O simplemente observa desde las sombras, viendo cómo su experimento transforma el mundo financiero?

Sea quien sea, hoy brindo por ti, Satoshi. Felices 50 años, genio enigmático. Has creado algo que ni siquiera los gobiernos más poderosos pueden controlar completamente. Quizá ese era precisamente el punto.