El Senado de Estados Unidos realmente ha tomado medidas esta vez, y el borrador de la Ley de Estructura del Mercado de Criptomonedas ha sido publicado oficialmente. Activos digitales como Bitcoin y Ethereum finalmente serán incorporados en un sistema de gestión formal, lo cual tiene un significado muy simbólico.

Honestamente, una vez que este marco regulatorio de EE. UU. se implemente, afectará a todo el mundo. La UE ya aprobó el marco MiCA, y las autoridades financieras del Reino Unido seguramente ajustarán sus regulaciones en consecuencia; Japón continuará fortaleciendo los estrictos controles en los intercambios; Singapur probablemente elevará aún más los requisitos de KYC; y en lugares como los Emiratos Árabes Unidos, seguramente aprovecharán la oportunidad para atraer más fondos institucionales. Se puede decir que esta ley influirá directamente en la dirección de la gobernanza global de las criptomonedas en los próximos diez años.

La situación actual es clara:
Las criptomonedas han dejado atrás la era de crecimiento salvaje y en la sombra. La regulación ha llegado y no se puede detener. Los actores institucionales tendrán cada vez más influencia, y las reglas gubernamentales comenzarán a redefinir los límites de la innovación.

La cuestión es, ¿esta estructura sustentará el ecosistema o acabará sofocando su ADN innovador? Eso dependerá de los detalles de su implementación.

Pero una cosa está clara: las criptomonedas han entrado oficialmente en la era de la regulación, y EE. UU. está decidido a liderar el camino.